miércoles, 16 de julio de 2014

COCINA CON FLORES SILVESTRES


Salí en la mañana a caminar, Vi muchas flores silvestres. Recogí algunas de mi jardín, tréboles que han crecido gracias a las lluvias, las desinfecté y con ellas hice hielos, y una ensalada. Luego cociné pollo con cebolla caramelizada ,  salsa de mango con habanero, de postre preparé un crocante de queso crema con frutos secos, debe servirse muy caliente, recién acabado de freír para que al contacto con la nieve de piñón sepa delicioso. Y así sabía. Mi hermano hizo el  sushi de pepino y uva. Comimos  juntos. Mi hermano es mi mejor amigo. Es bueno tener su compañía. Petit también se unió por un instante. Hay pocas cosas tan bonitas como cocinar. 








AGUA PANELA



Para llegar a Acaime hay que cruzar antes el río y sus cascadas por siete puentes colgantes. Arriba, en el santuario de colibríes, un viejito que recibe a los viajeros te ofrece "agua panela" con queso y almojabana. A la panela le llamamos piloncillo en México, es una sopa dulce y caliente, el queso salado se corta en pedazos pequeños y se sumerge en el tazón, la almojabana es una esfera de pan, una bolita esponjosa que le hace buena compañía. Te alivia el cansancio, es delicioso. Te sientas en una roca, o en las bancas de madera, al frente hay un mapa que muestra la ruta que queda, dibujos de animales que puedes encontrar en el bosque: osos,mapaches, aves. 
Cuando te has recuperado el instinto te guía a asomarte por el barandal, desde ahí la vista te confirma que has subido un gran camino en unas cuantas horas, abajo las cascadas, los arboles, arriba la niebla. Al lado tuyo hay dos o tres viajeros más que descansan mientras vuelan los pies tentando el acantilado, te toca decidir que ruta tomar. "Puedes hacer algunas horas o quizá varios días" nos dice el viejito al que después pregunto: ¿Cómo te llamas? y me responde "Pedro Infante" Yo le sonrío
























Esa raíz debe nutrir mi sangre.Otra encrespada, abajo, es parte poderosa del silencio, se impone como paso de reptil: avanza devorando, toca el agua, la bebe, y sube por el árbol la orden secreta:sombrío es el trabajo para que las estrellas sean verdes. 
Pablo Neruda






martes, 15 de julio de 2014

POZOS AZULES

Estábamos atrapadas en ese lugar de Colombia. No había transporte. Nos levantamos temprano para conseguir un auto. Llegamos a una calle donde estaban los militares, preguntamos y dijeron que no habría transporte, minutos más tarde se nos acercó una señora y dijo que podíamos viajar con ella. "Yo no quiero salir pero tengo una cita medica, el señor de allá nos puede llevar si quieren" Hablamos con el señor, el costo por viajar en su auto era caro. Luego se acercó otro y dijo que  podría llevarnos, también necesitaba  ir al doctor, nos cobraba mucho menos. "Pero salgo hasta la una" nos dijo. Quedamos que nos veríamos en el mismo lugar y partiríamos juntos hasta Tunja. Luego en Tunja resolveríamos como llegar a Bogotá sin ellos. Eran las diez de la mañana. Teníamos tiempo, caminamos  al desierto de los pozos azules, no queríamos perder la visita. Cuando llegamos vimos un paisaje precioso, lamentamos un poco no haber comprado un vino y unos emparedados para comerlos ahí. Recogimos unas pequeñas piedras. En mi buró tengo ahora una, redonda. El camino era pesado pero ya llevábamos varios días viajando a pie.